Tras mi segunda maternidad, hará ya casi 8 años, ví la necesidad de un cambio profesional.
Sentía que ya no pertenecía al lugar donde había pasado mis primeros años laborales.
Quería ver crecer a mis hijos, estar donde me necesitasen, no tener que hacer malabarismos para poder ir a trabajar o los odiosos horarios.
Descubrí la profesión digital de asistente virtual.
¡Era ideal! trabajar desde casa, gestionar mi horario y poder disfrutar de mis hijos.